Oí una gran
Viniendo del cielo
El Santo del Señor
Con los hombres están
Vivirá con ellos
Y serán su pueblo
El poderoso Dios los guiará
No más lágrimas
Sus ojos tendrán
Porque muerte no habrá
Nunca más aflicciones existirán
Y todo el dolor pasará
Las primeras ya no están
Todo aquí nuevo es
Estas palabras escribirás
Pues ellas son la verdad
Amén, amén
Amén, amén